Informe de batalla: encuentro en el bosque

¡Saludos a todos!

Nuestro hobby acostumbra a ser un ente desconocido y bastante lleno de prejuicios por parte de la gente ajena a él. Es (era) el caso de la novia de mi hermano, quien había oído hablar alguna vez sobre miniaturas, pero que cuando vio que estaba pintando me preguntó si pintaba budweisers (si: quería decir warhammers).

El tema es que la enésima vez que me vio pintando me preguntó si realmente jugaba después con esos muñecos que pintaba. Le confesé que no tanto como me gustaría, pero que sí, que jugaba. Y le pregunté si quería probar. Sorprendentemente me dijo que sí, así que recuperé el primer fascículo de warhammer para jugar el escenario: encuentro en el bosque, y nos pusimos a jugar en mi misma mesa de estudio:

Las fuerzas reunidas eran las originales, que ya había pintado para posibles partidas como ésta y creo que ya he enseñado por aquí. Yo llevaba los orcos, y ella los "humanoides":

El escenario, como digo, muy sencillo: ella tenía que abatir a los orcos antes de que el orco de la espada llegara al combate cuerpo a cuerpo donde, con su gran espada, podía acabar con los arqueros sin problemas.

La primera partida empezó con algo de confusión por su parte:

Pero pronto entendió que a distancias largas era más difícil disparar, y que la piel de orco es más resistente que la humana. Aún y así hizo la primera baja:

Con todo, la suerte no la acompañó en los siguientes turnos...

...y el orco espadachín llegó hasta el combate cuerpo a cuerpo, con lo que ganó la primera partida:

Los humanos habían perdido, pero reclamó la revancha... Y ganó. Y hubo una partida de desempate... Que ganaron los orcos de nuevo. Así que ante tal "empate de victorias" tocaba hacer "la partida final, la que decide quien gana". A esta además se le sumó banda sonora, para meternos más en tensión:

Empezaba a anochecer, así que tuvimos que encender la luz (y las fotos se volvieron mucho más malas, así que lo siento de antemano):

Los turnos se sucedían, y los humanoides no conseguían derribar al orco con espada, que parecía que iba a llevarse la victoria por tercera vez. Pero en el turno antes que los alcanzara, un disparo certero lo derribó definitivamente:

De repente habían cambiado las tornas, y parecía que los arqueros iban a alzarse con los laureles. Sin embargo, el arquero pielverde no había dicho su última palabra, así que derribó a un arquero:

Hecho que desembocó en un intercambio desesperado de flechas entre los dos supervivientes, hasta que finalmente...

¡Victoria humana! Los arqueros se llevaban la victoria "de verdad, la que cuenta" y la novia de mi hermano se alzaba como una estratega impecable, a la altura de Julio César como poco, mientras que yo quedaba relegado a mero perdedor, a pesar de mis años de experiencia. 

Pero le había gustado mucho, así que esperamos repetir la experiencia de nuevo. Quizás con el mismo escenario o con otro, ya veremos. Lo que cuenta es que este primer escenario nos había dado para unas buenas risas, y no necesita prácticamente nada para jugarse, con lo que os lo recomiendo fervientemente.

Espero que también os haya gustado, y disculpas de nuevo por la calidad pésima de las fotos, cosa a mejorar en nuevos informes.

¡Nos leemos!

Daniel